lunes, 6 de marzo de 2017

De nuevo de vuelta

Ha pasado mucho tiempo, dos años exactamente, pero he vuelto.

Muchos de los que me conocéis sabeis que han sido dos años con muchos cambios, pero con las ganas, la entrega y el coraje que siempre me ha caracterizado.

Dejé de escribir por varios motivos, primero por falta de inspiración, después por una lesión que marcaría un antes y un después, y por último a causa de una serie de proyectos que me ocupaban mucho tiempo. Pero una vez puesto todo en orden, creo que es el momento de volver al blog y de escribir sobre este mundillo tan nuestro.

No es fácil volver después de tanto tiempo, es como reconciliarse con alguien al que hace mucho que no ves, pero que es necesario hacerlo. ¿Y qué haces después de haberte disculpado? Pues probablemente hablar de todo lo que os habéis dejado por el camino con el paso del tiempo, y la mejor manera de hacerlo es cronológicamente. Por tanto, así retomaré esta nueva etapa. Lo primero será pediros perdón por este tiempo en el que estuve un poco ausente. Aunque en ningún momento me olvidé de quienes habéis estado ahí y seguís estando. 

Mi última entrada fue el 9 de febrero de 2015 y desde ahí en adelante os iré contando experiencias. Pensaba dedicar una entrada mi especial a la siguiente experiencia, ya que para mí ha marcado una etapa importante en mi modo de afrontar una carrera. Esa experiencia fue el Maratón de Sevilla.

ZURICH MARATON DE SEVILLA 2015

El 22 de febrero corría mi primer maratón. Creo que ha sido el día que mas nervios he sentido antes de una carrera y a la vez, uno de los que más a gusto me he sentido corriendo. Vaya por delante que aún no conozco al "tío del mazo", debo decir que mi plan de entrenamiento dio sus frutos. Volví a correr con Luis y Riki. Elegimos una estrategia muy conservadora, haciendo todos los kilómetros al mismo ritmo. La primera media fuimos los tres juntos, pero a partir del km. 28, Riki acompañó a otro corredor con algún que otro problema. A partir de ese momento, hicimos el resto de carrera Luis y yo.  Todo iba según lo previsto, estábamos a 10 km de la meta, y veíamos corredores a ambos lados de la carretera sentados, andando, bastante exhaustos. Fue bastante sonado el número masivo de abandonos. Ese día hizo calor, pero un calor muy normal en Andalucía, nada fuera de lo común. Los kilómetros empezaban a notarse en nuestras piernas, pero nuestro ritmo seguía siendo firme, e íbamos  demasiado enteros pese a todo lo comentado. Habíamos cruzado el centro de Sevilla y nos dirigíamos hacia La Cartuja. Eran los kilómetros más duros para nuestras cabezas, pero las piernas seguían respondiendo y la emoción cada vez era mayor. Ya veíamos el estadio, estábamos a punto de entrar bajo el puente de la puerta de acceso, y allí estaban nuestras familias. No lo esperábamos y la alegría nos empujó hasta el tartán, a 300 metros de cruzar la meta, y se cumplió mi sueño. Cruzaba la meta de la mítica distancia de 42.195 metros, por primera vez en mi vida, algo que veía tremendamente lejos cuando empecé en este mundo.


Elegimos un plan de carrera creado por Martín Fiz para acabar en 3 horas 30´. ¿Adivinais cuál fue el tiempo total? Exacto, 3:30:39 fue la marca que logramos entrando juntos en la meta. 

Desde aquí os animo a que alguna vez en la vida os animeis a correr un maratón. Eso sí, habiendo corrido antes algunas medias, y algunas distancias intermedias. Y por supuesto, con un plan serio de entrenamiento.



Espero que esta nueva entrada no os haya defraudado y que sigamos encontrando en este blog, un rincón donde continuar disfrutando de este deporte.




Gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario